Guiso de Costilla de Cerdo con Patatas y Zanahorias

Descubre cómo preparar un delicioso guiso de costilla de cerdo con patatas y zanahorias. Una receta fácil y sabrosa que te hará chuparte los dedos. Perfecta para disfrutar en familia durante los días fríos de invierno. ¡No te la pierdas!

Ingredientes

Preparación

  1. En una olla grande, calentar un poco de aceite de oliva.
  2. Agregar las costillas de cerdo y dorarlas por ambos lados.
  3. Retirar las costillas de la olla y reservar.
  4. En la misma olla, agregar un poco más de aceite de oliva y añadir la cebolla picada, el ajo picado, el pimiento rojo y el pimiento verde picados
  5. Agregar el tomate picado y cocinar por unos minutos más.
  6. Añadir las zanahorias peladas y cortadas en rodajas gruesas, y las patatas peladas y cortadas en trozos medianos.
  7. Incorporar las costillas de cerdo nuevamente a la olla.
  8. Espolvorear con pimentón dulce, sal y pimienta al gusto.
  9. Verter el caldo de carne suficiente para cubrir los ingredientes.
  10. Agregar unas hojas de laurel y tapar la olla.
  11. Cocinar a fuego medio-bajo durante aproximadamente 1 hora, o hasta que las costillas estén tiernas y las verduras estén cocidas.
  12. Remover de vez en cuando y añadir más caldo si es necesario.
  13. Retirar las hojas de laurel antes de servir.
  14. Opcionalmente, espolvorear con perejil picado antes de servir.
Guiso de Costilla de Cerdo con Patatas y Zanahorias

¿Cuántas costillas de cerdo se necesitan por comensal?

La cantidad de costillas de cerdo necesarias por comensal puede variar dependiendo de varios factores. En promedio, se estima que cada persona consume alrededor de 2 a 3 costillas de cerdo en una comida. Sin embargo, esto puede variar según el apetito de cada individuo y el tamaño de las costillas.

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Si se trata de costillas pequeñas, es posible que necesites servir más por persona. Por otro lado, si las costillas son más grandes, es posible que una o dos sean suficientes. También es importante considerar si las costillas se sirven como plato principal o como parte de una comida más completa.

Además de la cantidad, también es importante considerar la calidad de las costillas de cerdo. Es recomendable elegir costillas frescas y de buena calidad para garantizar un sabor delicioso. También puedes marinar las costillas antes de cocinarlas para agregar aún más sabor.

Recuerda que estas cantidades son solo una guía general y puedes ajustarlas según tus necesidades y preferencias. Siempre es recomendable tener un poco más de comida de lo necesario para asegurarte de que todos los comensales estén satisfechos.

Secretos para lograr unas costillas de cerdo tiernas y jugosas

Para lograr unas costillas de cerdo tiernas y jugosas, es importante seguir algunos secretos culinarios que harán la diferencia en el resultado final.

El primero de ellos es marinar las costillas. La marinada es una mezcla de ingredientes que ayuda a ablandar la carne y aportarle sabor. Puedes utilizar una combinación de aceite de oliva, jugo de limón, ajo, sal, pimienta y hierbas aromáticas. Deja las costillas marinar en la nevera durante al menos 2 horas, aunque lo ideal es dejarlas toda la noche para que absorban bien los sabores.

Otro secreto es cocinar las costillas a baja temperatura durante un tiempo prolongado. Puedes utilizar el horno a una temperatura de 120 °C durante al menos 3 horas. También puedes optar por la cocción a fuego lento en una olla o en una parrilla. Esto permitirá que la carne se cocine lentamente, se ablande y se impregne de los sabores de la marinada.

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Finalmente, para obtener unas costillas jugosas, es importante sellar la carne antes de cocinarla. Esto se logra dorándolas en una sartén caliente con un poco de aceite. Con esto se crea una capa exterior crujiente que retiene los jugos en el interior de la carne.

Siguiendo estos secretos culinarios, podrás disfrutar de unas deliciosas costillas de cerdo tiernas y jugosas que seguramente cautivarán a todos los comensales.

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