Croquetas con Harina de Garbanzo
Ingredientes
Preparación
- En un recipiente grande, mezcla la harina de garbanzo, la levadura en polvo, la sal, el ajo en polvo, la cebolla en polvo, el pimentón dulce y el comino en polvo.
- Agrega el agua poco a poco y mezcla hasta obtener una masa homogénea.
- Cubre la masa con un paño y déjala reposar durante al menos 30 minutos.
- En una sartén, calienta suficiente aceite vegetal para freír las croquetas.
- Toma porciones pequeñas de masa y dales forma de croquetas.
- Fríe las croquetas en el aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes.
- Retira las croquetas del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
- Sirve las croquetas calientes como aperitivo o acompañamiento.
Descubre los beneficios de la harina de garbanzo
La harina de garbanzo es un ingrediente versátil y saludable que puede agregar sabor y nutrición a tus recetas. Esta harina, hecha de garbanzos molidos, es rica en proteínas, fibra y vitaminas. ¡Descubre sus beneficios!
Uno de los principales beneficios de la harina de garbanzo es su alto contenido de proteínas. Es una excelente opción para personas que siguen una dieta vegetariana o vegana, ya que puede reemplazar la harina de trigo en muchas recetas. Además, las proteínas son esenciales para el crecimiento y reparación de los tejidos, así como para el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
Otro beneficio de esta harina es su contenido de fibra. La fibra ayuda a mantener una buena salud digestiva, previene el estreñimiento y promueve la sensación de saciedad, lo que puede ayudar a controlar el peso. Además, la harina de garbanzo es baja en grasas saturadas, lo que la convierte en una opción más saludable que otras harinas.
La harina de garbanzo también es rica en vitaminas y minerales, como hierro, magnesio y vitamina B6. Estos nutrientes son esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo, ya que participan en procesos metabólicos y ayudan a mantener un sistema inmunológico fuerte.
Tiempos de conservación de la harina de garbanzo hecha en casa
La harina de garbanzo hecha en casa es una opción saludable y versátil para agregar a tus recetas. Sin embargo, es importante saber cuánto tiempo se puede conservar para aprovechar al máximo sus beneficios.
En general, la harina de garbanzo casera puede durar hasta 6 meses si se almacena correctamente. Es fundamental mantenerla en un recipiente hermético en un lugar fresco y seco, lejos de la luz solar directa. Además, es recomendable etiquetar el recipiente con la fecha de preparación para tener un mejor control de su frescura.
Es importante tener en cuenta que la harina de garbanzo hecha en casa tiende a tener una vida útil más corta que la harina de garbanzo comercial debido a la falta de conservantes. Por lo tanto, es recomendable hacerla en pequeñas cantidades según sea necesario para mantener su calidad.
Si notas cambios en el olor, color o textura de la harina de garbanzo, es mejor desecharla, ya que podría estar rancia o haberse contaminado. Recuerda que la seguridad alimentaria es primordial.